-Entregan tanques con kilos incompletos, además de cambiar los buenos por equipos deteriorados
Por Ángel Estévez
Autoridades correspondientes deben de frenar los abusos que vienen cometiendo los repartidores de gas doméstico, pues desafortunadamente se siguen distribuyendo tanques de gas con menor cantidad a lo que se solicita y se paga.
“Los repartidores dejan cilindros completamente deteriorados y se llevan los que les corresponden a los dueños”, mencionó Doña Josefina, quien vive en la calle Pavón de esta localidad.
“Lo peor es que cuando el cliente solicita nuevamente el llenado del recipiente con gas, el repartidor no sólo se quiere llevar el deteriorado, lo peor es que se llevan el de uno que está en buen estado y al regresarlo dejan uno en peor estado”.
Don Agustín Zúñiga mencionó que él pintó su tanque para poder identificarlo y le entregaron uno que no era el suyo; “al preguntarle al repartidor qué había pasado, sólo me contesto, perdón jefe, no me fijé”.
Haciendo un censo, se estima que la familia promedio consume un tanque de 30 kilos al mes, subiendo su tarifa a 378 pesos; las personas que ocupan un poco menos el gas son aquellas que no cuentan con boiler o calentador.
Todas las gaseras que abastecen deberían de contar con mecanismos que comprueben al usuario, en el momento de la compra, que venden tanques con el peso reglamentario de gas y surten los estacionarios de la misma manera.