Sin embargo, ahora coinciden varios perredistas y ex perredistas, quienes opinan que lo único amarillo que le queda al PRD en Veracruz es el logotipo, porque es más rojo que el propio PRI, pues hasta sus llamadas “tribus” están más interesadas en conseguir prebendas, en lugar de buscar desarrollar sus proyectos políticos al interior del partido.
Juan Vergel Pacheco, Uriel Flores Aguayo, Agustín Mantilla Trole, Elías Miguel Moreno Brizuela, Enrique Romero Aquino, Atanasio García Durán y Brenda Abigail Reyes Aguirre son ex perredistas y futuros ex perredistas, quienes durante años pugnaron para que el PRD pudiera ser una opción de gobierno para Veracruz, y hoy lamentan que dicho partido corre el riesgo hasta de perder el registro.
Los nombres de Sergio Rodríguez Cortés y Rogelio Franco Castán son los principales que suenan como los responsables de la debacle perredista en Veracruz, pues hasta hace 10 años se consideraba a esta entidad como un bastión de la izquierda, y hoy prácticamente es nula su presencia en el estado.
Tanto en elecciones locales como federales los distritos de Papantla, Poza Rica, Zongolica, Cosoleacaque, Acayucan, Coatzacoalcos y Xalapa, eran ganados o fuertemente disputados por el PRD, pero fue en el año 2010 cuando ganó su último distrito local electoral y desde entonces ha sido relegado al tercer o cuarto lugar.
Juan Vergel Pacheco se define como el último verdadero dirigente estatal que representaba los intereses de un gobierno de izquierda, con un ideal de justicia social, sin embargo, acusó que el Gobierno estatal en complicidad con el Tribunal Estatal Electoral orquestaron un fraude para que llegara Sergio Rodríguez Cortés, quien sirvió por completo a los intereses de Javier Duarte de Ochoa.
Recordó que en el año 2012, Sergio Rodríguez Cortés era el Director del Servicio Nacional de Empleo en Veracruz, cargo en el que permaneció durante seis meses, y un par de meses después estaba compitiendo por ser el dirigente estatal del PRD.
“En ese entonces había que avanzar muy importantes para una coalición entre el PRD y el PAN, incluso Convergencia y PT para competir en las elecciones intermedias contra el PRI, pero la misión de Sergio Rodríguez era clara, y fue ganar la dirigencia del partido y echar abajo la coalición que permitió al PRI mantener el control en el Congreso y ganar la mayoría de las presidencias municipales”, expresó.
Desde entonces, varios de los liderazgos del PRD comenzaron a señalar la existencia de un “PRD rojo”, pues Sergio Rodríguez Cortés se alineó a los intereses del Gobierno estatal y del Revolucionario Institucional, hasta casi desaparecer la simpatía electoral hacia este partido.
A la par, a nivel nacional, la salida de Andrés Manuel López Obrador del PRD, hizo que grupos de perredistas en Veracruz abandonaran este partido y se sumaran a las filas de Morena. El segundo golpe fue la salida de Marcelo Ebrard Cassaubón para sumarse a Movimiento Ciudadano.
Estas rupturas a nivel nacional, hizo que varios cuadros del perredismo y sus llamadas tribus, también comenzaran a renunciar al PRD en Veracruz, tales son los casos de Agustín Mantilla Trolle, Elías Miguel Moreno Brizuela, Brenda Abigail Reyes Aguirre y Atanasio García Durán.
Otros más que están en vías de hacerlo, y así lo han anunciado, una vez que concluya el proceso electoral federal son Uriel Flores Aguayo, Celso Pulido, Carlos Mezhua y Antonio León Mendivil.
Adiós a las tribus
Si bien dentro de cada partido político, existen agrupaciones o sectores que coinciden en intereses o ideales, lo mismo ocurre en el PRD, sin embargo ellos mismos las han autodenominado “tribus”, porque durante sus asambleas acostumbraban agarrarse a golpes, previo a tomar acuerdos.
En Veracruz las tribus más representativas son Nueva Izquierda liderada por Rogelio Franco Castán; Frente de Izquierda Progresista por Manuel Bernal Rivera e Izquierda Democrática Nacional encabezada por aquellos simpatizantes de Arturo Hérviz Reyes.
En menor medida se encuentra Foro Nuevo Sol, donde se han refugiado los pocos cuadros representativos que le quedan al PRD como Juan Vergel, Margarita Guillaumín y Enrique Romero Aquino.
Los grupos que están casi por desaparecer son: Nueva Izquierda Sonríe e Izquierda Democrática Nacional, sin embargo, en términos generales todas las tribus ya no buscan imponer un proyecto político al interior del PRD, pues sus representantes lo único que persiguen es alcanzar en primer lugar alguna cartera dentro de la estructura del Comité Directivo Estatal y en segundo, el más anhelado: la dirigencia estatal.
En los últimos tres consejos estatales del PRD, uno para elegir a sus candidatos y los dos anteriores relacionados a la elección de la dirigencia estatal, la violencia y el desorden no se hicieron presentes, por el contrario hubo consenso, lo que a decir del Diputado Federal Uriel Flores Aguayo significa que ya todos estaban “maiceados”.
“Ya no había necesidad de discutir ni debatir propuestas, porque ahora en el PRD las cosas se hacen al estilo priista y con los recursos del PRI, por eso hasta se extrañan los golpes”, agregó.
Los números rojos del PRD
De acuerdo con las cifras del último proceso electoral en Veracruz celebrado en el año 2013, el PRD es la tercera fuerza electoral en la entidad, sólo por debajo del PRI y PAN.
En dicho año, el PRD alcanzó una votación de 340 mil 345 votos, equivalente a un 10.51 por ciento de la votación emitida, consiguió ser gobierno en 32 municipios, pero fue incapaz de ganar un solo Distrito electoral.
En el actual proceso electoral, algunas de las encuestas que han trascendido, lo ubican en Veracruz en una pelea entre el tercer y quinto lugar, junto al Verde Ecologista y Morena.
La separación de Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard del PRD junto al desinterés de sus tribus por participar al no verse beneficiados en los acuerdos con el Gobierno estatal, ubicaría a este partido hasta el quinto lugar.
