-Son la evidencia de la crisis económica y el desempleo
Por Isaac Carballo Paredes
El producto del desempleo y de la crisis económica que azota a la región no sólo ha traído como consecuencia una ola de asaltos y robos en la ciudad, sino que también un aumento considerable en la cantidad de indigentes que se han apoderado de espacios públicos y de sano esparcimiento.
Desde 2015 se comenzó a observar que tanto calles, parques, camellones e incluso las zonas bajas del distribuidor vial, han sido invadidas por cientos de personas que no necesariamente padecen de sus facultades mentales, sino que simplemente se encuentran sin hogar.
En los últimos meses el panorama se ha extendido a parques del primer cuadro de la ciudad, ya que diversas bancas del Parque “Juárez”, ubicado frente al Palacio Municipal, sirven como dormitorio para varios indigentes.
El domo de la Plaza Cívica también es un sitio que ha sido tomado por los desprotegidos, al igual que sus bancas y jardineras; monumentos, nichos, plazas como Garibaldi, el camellón central del boulevard Ruiz Cortines son utilizados como motel de paso para los indigentes.
Cualquier lugar es bueno para dormir cuando no se tiene nada; sin embargo, varios han optado por habitar zonas peligrosas como puentes peatonales, debajo de los puentes vehiculares, en predios baldíos y en viviendas que han sido abandonadas por sus dueños.
Actualmente, Poza Rica se ha convertido en una muestra de la severa crisis que afecta a gran parte de la entidad, en donde el desempleo va a la alza, donde las calles están tapizadas de letreros con anuncios de locales en renta y ahora con una gran cantidad de personas sin hogar, apoderándose de los pocos espacios de esparcimiento.
