-En municipios de la Zona Norte como Ilamatlán, médicos y enfermeras abandonaron sus labores, ante la ola de violencia
Por ISAAC CARBALLO PAREDES
Totalmente consternados se encuentran los trabajadores del Sector Salud, que prestan sus servicios en comunidades serranas de la Zona Norte, ante la ola de violencia y asaltos que se registran en los Centros de Salud e incluso consultorios privados; ante tales circunstancias y el temor a perecer en el ejercicio de su profesión, han decidido abandonar sus labores.
En municipios de la Zona Norte del estado, como Ilamatlán, han sido presa de la delincuencia que se ha desatado con fuerza en contra del Sector Salud; en la localidad de San Pablo Mitecatlán del citado municipio, desde hace más de un año su unidad médica rural no contaba con médicos y enfermeras.
La razón principal por la que estos médicos decidieron huir de aquel lugar, fue la gran cantidad de asaltos que padecieron, amenazas y violencia que sufrieron los trabajadores de la Salud, y que ante el temor de perder la vida decidieron abandonar el municipio, destacó el Jefe de la Jurisdicción Sanitaria número 3, Armando Kirsch Ramos.
La misma situación prevalece en Córdoba, donde por lo menos 20 médicos ejercen su profesión bajo el temor de ser sometidos por la delincuencia, una zona donde ya se han registrado actos de violencia en contra de los doctores y enfermeras.
Incluso no sólo las unidades rurales han sido atacadas por la delincuencia; en el mes de mayo de este año, el Secretario de la Sección 40 del Sindicato Nacional de Trabajadores al Servicio de la Secretaría de Salud, Álvaro Barrios Sánchez, denunció que se registraron cuatro asaltos a mano armada en el Hospital de Alta Especialidad de Veracruz.
El jefe de la JSN3 insistió en que no son muy comunes este tipo de casos en la Zona Norte, pero en el caso de Ilamatlán se logró restablecer el servicio médico, luego de comprometer a las autoridades municipales y a la comunidad, de custodiar en todo momento a los trabajadores de la Salud.
Kirsch Ramos subrayó que esta situación ha generado que los Centros de Salud de las zonas serranas, no cuenten con el personal médico necesario de su cuadro básico y tampoco el abasto de medicamentos para atender a la población.
